Desde hace un tiempo, Oscar Ibáñez había quedado viviendo solo en su casa del paraje Porotal, a 60 kilómetros de la ciudad de Campo Gallo, departamento Alberdi. Su pareja y su hijo de 17 años —por causas que anoche eran investigadas— habían abandonado la vivienda y se fueron a vivir en otro paraje de las cercanías.

Poco importa quién habría comenzado el incidente, ya que en final padre e hijo murieron anoche al tranzarse en una sangrienta pelea a puñaladas.

Según el operativo del personal de la Seccional 18, las víctimas resultaron Oscar (“Oshky”) Ibáñez, de 53 años y su hijo, Brahian Ibañez, de 17.

De acuerdo con testigos, Brahian y al menos un hermano tenían una mala relación con su padre, a quien golpeaban.

Eran innumerables los malos tratos a “Oshky”, por los cuales el hombre andaba armado con un rifle, trascendió.

Tres días atrás, “Oshky” se trasladó a la casa de Brahian, quien tenía una pareja y una hijita, deslizaron los testigos.

Incidente de pareja

Al parecer, Brahian peleaba mucho con su pareja y el abuelo se llevó a la nieta, hasta tanto sus padres se calmasen.Otra versión sobre la causa del incidente es que pudo haber una discusión por la separación del hombre y la madre del adolescente, y su posterior alejamiento de la casa.

Con un clima enrarecido, Brahian se habría presentado ayer en la casa de su padre.

Nadie sabe bien qué sucedidió, pero alrededor de las 20.30 padre e hijo habrían comenzado a pelearse a cuchilladas.

Brahian le habría asestado un golpe mortal debajo de la tetilla, a la altura del corazón.

Antes, su padre hizo lo propio, pero hiriéndolo al menos tres veces en el abdomen.

Barbarie familiar

El primero que cayó fulminado fue “Oshky”, quien terminó muerto en el patio de la casa.

Urgente, los familiares alertaron a la policía y al personal del Hospital de Santos Lugares, en el departamento Alberdi.

Mientras el vehículo intentaba arribar al nosocomio, Brahian habría dejado de existir, al parecer por un shock hipovolémico (pérdida de sangre).

Después de las 22, la policía impuso un cordón en la vivienda para preservar la escena.

Hasta la medianoche, los efectivos trabajaron con el secuestro de las armas, tomas fotográficas y testimoniales.

En los primeros minutos de hoy, los dos cuerpos eran trasladados al Hospital de La Banda para las autopsias.

Luego, serán llevados y entregados a sus familiares.